Lección 01: Así funciona tu cabecita

El origen de todo

¿Qué te ha traído hasta aquí?

Seguro que has oído hablar de la meditación y de sus increíbles beneficios; quizás incluso hayas probado a meditar y te hayas llevado alguna pequeña desilusión por no encontrar lo que esperabas.

Sin una comprensión básica de los procedimientos de la mente, es imposible entender qué hacer cuando nos sentamos en lo que creemos que es postura meditativa con un aspecto muy sobrio a esperar a que se solucionen todos nuestros problemas.

En este pequeño vídeo, te explico de manera muy gráfica y sencilla qué son los pensamientos, cómo se dan y cómo podemos favorecer una mayor claridad mental.


Hay dos ideas clave que sería importante recordar:


  1. No eres tus pensamientos, y ningún tipo de información que proceses a través de la mente constituye quien tú eres. Aquello que llamas yo es el cúmulo de la información con la que te has ido identificando a lo largo de los años (e incluso vidas). Cuando experimentas un acontecimiento y emites juicios al respecto, lo rememoras, lo evalúas, etc., generas nueva información que se te te adhiere y que definirá quien crees ser tanto como la pienses o actúes condicionado por ella. 
  2. Solo puede emerger un pensamiento nuevo, novedoso, cuando permitimos espacio en nuestro interior. De igual manera, solo descubriremos quiénes somos realmente y nuestras virtudes cuando nos abramos a nuestra esencia: aquello que va más allá de todas las bolitas de pensamientos a las que tendemos a apegarnos y de las cuales suele derivar su identidad la persona estándar.


Todo en este mundo es información, es energía, es una de esas bolitas energéticas que permanecerán contigo tanto como centres tu atención en ellas.

La satisfacción verdadera nunca llega de cumplir con las ideas de ideal de vida que te dicen esas burbujitas. Tampoco se encuentra al cumplir tus metas, que siguen siendo bolitas.


La verdadera satisfacción y dicha solo se encuentra cuando uno se relaciona con el mundo a través de su esencia de quietud interior.


Así pues, sigamos descubriendo cómo funciona nuestro interior para poder habitar la armonía que somos en esencia.

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